viernes, 13 de octubre de 2017

Nosotros – Yevgueni Zamiatin


"La hermosura del mecanismo reside en su ritmo inalterable, concreto y exacto, idéntico al de un péndulo.¿Acaso vosotros, que desde la primera infancia fuisteis educados según el sistema Taylor, no sois también tan exactos como un péndulo?… Pero si todo esto es decisivo más decisivo todavía es lo siguiente: Los mecanismos no poseen fantasía”.


En la ciudad de cristal y acero del Estado Unico, separada por un muro del mundo salvaje, la vida transcurre sometida a la inflexible autoridad del Bienhechor : los hombres-número trabajan con horarios fijos, siempre a la vista de todos, sin vida privada: el "yo" ha dejado lugar al "nosotros". El narrador de este diario íntimo, D-503, es el constructor de una nave interestelar que deberá llevar al universo «el bienaventurado yugo de la razón». Pero se enamora: el amor equivale a la rebelión, y el instinto sexual al deseo de libertad. Aunque, tras extirparle a D-503 el "ganglio craniano de la fantasía", el Estado sedentario, entrópico, salga victorioso de la conspiración, allende sus muros siguen los hombres nómadas, llenos de energía, que generarán nuevos insurrectos: no existe, ni jamás existirá, la última revolución.
Muchos lectores, al leer NOSOTROS, escrita entre 1919 y 1921, prohibida oficialmente hasta 1988 en la URSS, comprobarán cómo se anticipa magistralmente a todas las novelas posteriores sobre utopías totalitarias, sobre todo la de Orwell, 1984. Junto a Un mundo Feliz (Aldous Huxley) y 1984 (George Orwell) forma la trilogía clásica de novelas antiutópicas de la primera mitad de siglo XX.

Título: Nosotros.
Título original: We.
Autor: Yevgueni Zamiatin.
Año de publicación original: 1922.
Editorial: Seix Barral
Año de publicación ésta edición: 1972.


Desde el comienzo nos presentan a D-503, que luego se conocerá simplemente por D. Es un ingeniero que participa en la construcción de “El integral”, una nave que contendrá muchas cosas, entre esos su diario donde va anotando los acontecimientos importantes que va viviendo en el Estado Único, donde nadie tiene privacidad y todo está estrictamente organizado con horarios y de incumplirlos se podría recibir un llamado de atención. Un tiempo específico para cada minuciosidad. Todo va monótono e incluso tiene un romance con O-90, una mujer con quien frecuente, pero de un momento a otro conoce a I-330, otra mujer que comienza a metérsele por los ojos y esto causa en D anomalías en las que nunca había pensado, creándose así, dentro de él, un estado de raciocinio nunca pensado y que es considerada una enfermedad dentro del Estado Único. Esto causa implosiones y distintos comportamientos y descubrimientos en los que jamás había pensado.

Mientras que más allá del “Muro verde” se levanta una rebelión que nadie creía venir.

En todo el diario somos testigos y lectores (como él mismo nos llama, ya que es un documento que quedará para las futuras generaciones) de sus extraños cambios de comportamientos y la manipulación en la que se mantiene esa sociedad.



Lo comencé a leer porque hablaba con una amiga, terminamos hablando de distopías, me nombró este título que había escuchado una vez y olvidado, así que lo busqué hasta que lo conseguí y alternado con otras lecturas lo fui leyendo poco a poco para ir captando la esencia de lo que Zamiatin quería mostrar con esta novela.

Desde el comienzo incluso te hace pensar que las personas se encuentran en un jardín del Edén o algo muy similar, donde todo es sumamente hermoso, unicolor, organizado, no hay nubes que entorpezcan el color azul del cielo y cosas por el estilo, hasta que la trama va avanzando y te das cuenta que necesitan permiso exclusivo para poder tener distintos modos de privacidad y que las cosas se deben hacer del modo que las políticas del Estado único lo dicta.

Allí comenzó a atraparme, con el contraste de lo que podría ser una sociedad organizada, con pérdida de ciertos derechos a lo que se vive actualmente en varios países donde a través de ciertas políticas parecieran suministrar esas excesivas normativas que aplicaba el Estado Único en esta trama.

Es lo primero que leo del autor, tanto así que cuando leí solo el nombre, no sé por qué, llegué a pensar que era de la India y terminé encontrándome con “ERROR” en grande al saber que es ruso. Por lo general siempre me ha gustado como escriben los rusos y esta no es la excepción, sin embargo se nota también la diferencia de los rusos clásicos que se conocen (como Dostoievski, Chejov, Gorki o Tolstoi) como este Zamiatin de 1920, eso no lo hace malo, diría que es el cambio que se genera con el transcurso del tiempo.

Es una novela bastante entretenida, con buenas frases que mucha verdad, y contiene lo necesario. No está llena de escenas innecesarias ni nada. Cuando llegué a la parte donde el romance se comienza a colar detuve la lectura para pensar y esperar que no fuera como otras lecturas distópicas más actuales (sí, sé que es mucha diferencia pero nunca se sabe), seguí y no, para nada es igual pero aun así es bastante importante lo que el romance que se hace presente para la trama.


• D-503: Es el constructor de la nave “El integral” y al que yo le asigné la profesión (que nunca se menciona) de ingeniero, tanto por el conocimiento que muestra a través de su escritura, su lógica y lo que ejerce. Es el protagonista de todo, en torno a él gira la “enfermedad”, los pensamientos inesperados, los romances bruscos, la inventiva y reacciones bastante impresionantes.

• O-90: Es la mujer con la que D-503 mantiene un romance prestablecido por el Estado Único. Ama a D-503 aunque es algo insegura.

• I-330: Es la extraña mujer que D-503 conoce de un momento a otro capturado por su singular físico. Intenta acercarse y ésta parece esquivarlo. Es motivo de discusiones entre O-90 y D-503. 

• S-4711: Es un supervisor directo del Estado Único, nada se le puede pasar por alto, cualquier extraño comportamiento lo notifica a su Bienhechor. Se la pasa siempre con I-330.

• Bienhechor: Es el presidente del Estado Único y quien ha dictado las normas desde siempre.

• Mephi: Así se hacen llamar los rebeldes que están más allá del Muro verde.



Supongo que por ser en forma de diario, unido al interés que suma, y que cuenta lo esencial, es bastante rápida. Se lee de modo muy fácil. No es difícil de comprender, aunque admito que las primeras páginas me costaron entenderlas porque los nombres son letras y números y pensaba que hablaban sobre un artículo o sección de algo. Fuera de eso todo es bastante comprensible. Posee un argumento que se va desenvolviendo bastante bien. Me gustó el final, te hace ir en un sentido, luego se regresa, retoma el camino anterior y así va. No sé si el autor lo haría a propósito pero me agradó. Le quita un poco de cliché con respecto a las novelas utópicos.


Bastante fluida. No se entorpece, muy bien escrita. No tengo ninguna queja con respecto a la edición. Como todos los rusos, no sé para mi tienen algo en su escritura que me agrada, me atrapa.



Sí me gustó bastante. El final, aunque es interesante, no sé, me dejó algo desestabilizado, pero eso no quita que sea para nada mala. Al contrario, causó que le tomara más aprecio del que se iba ganando.

Lo recomiendo completamente. Incluso, si no has leído: Un mundo feliz (Aldous Huxley), 1984 (George Orwell) y Fahrenheit 451 (Rady Bradbury), deberías leer “Nosotros” primero, ya que fue una de las primeras novelas escritas de este siglo y que de hecho fue la que inspiró la escritura de las otras 3 que se escribieron y publicaron posteriormente.



Lo bueno: El concepto de la novela, es bastante original, hasta el momento todo lo que he leído se parece claro, pero a modo general, fuera de eso mantiene un argumento bastante interesante y que se desenvuelve como creo que debería ser.

Lo malo: Por momentos sentía que hacía falta mas detalles con respecto a la forma en que viven las personas. Sí se nombran algunas pero por la misma curiosidad y singularidad de estas costumbres incremente el deseo de saber más de cómo hacían equis cosa. Pero aún así no es nada completamente malo.


10/10





Escritor ruso, Yevgeni Zamiatin nació en Lebedian el 20 de enero de 1884. Está considerado como uno de los mejores escritores rusos de su generación.

De posiciones pacifistas, tuvo problemas tanto bajo el gobierno de los zares como en el régimen comunista. Sus obras fueron prohibidas en la Unión Soviética y Zamiatin tuvo que exiliarse a París.

Su obra más famosa es Nosotros (1921), obra que está contemplada como una de las grandes influencias visibles en 1984, de George Orwell.

Yevgeni Zamiatin murió en París el 10 de marzo de 1937.



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